Apartir de ahora, el que quiera aparcar en Sitges tendrá que caminar. Desde hace algunos meses el ayuntamiento ha impulsado un plan de peatonalización del casco urbano que expulsa a los coches del centro y los envía a la periferia. El objetivo es promover un nuevo concepto de movilidad en el que se dé prioridad al peatón ante el vehículo.Desde el año 2003 la administración local ha ido encaminando sus pasos hacia este objetivo, y en el último año se han peatonalizado algunas de las zonas más emblemáticas de la localidad. A finales de agosto se prevé eliminar el paso de los coches por el paseo de la Ribera en el tramo que llega hasta la avenida Sofía, por donde solamente podrán circular los coches autorizados. En total, desaparecerán unas 100 plazas de zona azul que seguramente se trasladarán a la zona del paseo marítimo más alejada del casco urbano.
